29/10/11 Partida nocturna especial Halloween – La Granja Airsoft

29/10/11 Partida nocturna especial Halloween – La Granja Airsoft



LA MATERIA DE LA QUE ESTÁN HECHAS LAS PESADILLAS, EL EXPERIMIENTO RUSO DEL SUEÑO

Hilo para apuntarse: http://www.lagranjaairsoft.com/t1092-29-10-11-nocturna-especial-halloween-partida-abierta-la-granja-airsoft



CAPITULO I

1952 algún lugar en los Urales, Rusia, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.

El soldado se bajo rápidamente del coche, sus botas chapotearon en el barro mientras daba la vuelta al vehículo y abría una de las la puertas traseras del Lada negro. Tiró de la manilla con la mano izquierda al tiempo que se cuadraba y se llevaba la mano derecha hacía su frente saludando.

¡¡A sus ordenes Camarada Coronel!!

El Coronel fioletovyĭ levantó la vista al tiempo que se calaba su gorra de plato, contempló por unos instantes el destartalado amasijo de naves y edificaciones que se alzaban frente a él. Habían tardado más de 10 horas a través de carreteras sin nombre hasta llegar a aquel infame lugar, en la puerta se leía: Fermy snovideniĭ, La Granja de los sueños, la gente que trabajaba allí preferían denominarlo la factoría de las pesadillas...



A Fioletovyĭ le habían encargado fiscalizar un experimento ultra secreto, los científicos de Fermy habían conseguido desarrollar un gas estimulante que conseguía estados de imsomnia increíblemente largos en animales de laboratorio, ahora había llegado la hora de dar el paso y probarlo en otro tipo de animales, digamos, más... humanos.

¡Ah! Esos buenos y grandes científicos, la mayoría eran alemanes capturados al final de la Gran Guerra Patria, por supuesto en ellos no quedaba ni rastro de su anterior ideología, se les había aleccionado para entender, amar y proteger al comunismo, eran un ciudadanos ejemplares, al menos eso era lo que decía el Tovarich komissar Josep. Fioletovyĭ no puedo evitar esbozar una sonrisa al pensar en el proceso de reeducación que habían "sufrido" aquellos tipos, su adiestramiento había sido muy suave en comparación al que se aplicaba en otros individuos menos valiosos.

Cuando habló para informarse de los avances de la investigación con Herr Doktor Luwig Schumaker pensó que el siguiente paso, el conseguir "cobayas" humanas quizá implicase algún tipo de dificultad derivada de complejos morales de los alemanes, pero no fue una sorpresa el entender que aquellos tipos carecían de cualquier escrúpulo al respecto, en su Alemania natal aquellos siniestros personajes habían llevado a cabo sus experimentos directamente con humanos, sin ningún tipo de fase previa con animales.

Fioletovyĭ y su ayudante caminaron hacía la entrada de un edificio en el que se leía el cartel de laboratorio, unos metros antes de llegar, la desvencijada puerta de entrada se abrió y salió un hombre alto ataviado con una bata blanca adornada con múltiples manchas y descosidos, el coronel le reconoció al instante, ¡¡Schumaker!! El Doctor, estaba con un aspecto mucho mejor que la última vez que se encontraron. En aquella ocasión estaba cubierto de polvo y sangre, refugiado en un bunker de las afueras de Berlín. El mismo Fioletovyĭ le puso el cañón de su Walther en la sien cuando capturo al sollozante Josep Luwig.



- Buenos días Tovarich Coronel, me alegra verle, es un honor para nosotros recibirle en nuestras instalaciones.

La voz de Schumaker era una mezcla de ruido nasal y tono engolado, más que un científico parecía uno de los politicastros que habían llevado su país a la ruina, su gesto servil con los hombros encorvados y en actitud sumisa indicaban que no le iba a causar ningún problema, de todas maneras aquellos vivaces ojillos claros bajo las cejas arqueadas no invitaban a la tranquilidad.

- Herr Doktor, respondió el Coronel, me alegra verle, veo que los procedimientos están avanzados, infórmeme por favor.

Ambos caminaron a través del angosto pasillo que surgía desde la entrada. Las luces no lograban echar a las tinieblas que parecían pegarse a cada recodo del laboratorio, giraron a la derecha mientras el Doktor iba enumerando pormenorizadamente los avances del experimento.



- Resúmame Doktor, no me han mandado aquí para oír cifras, quiero resultados comprensivos.

Schumaker comenzó a hablar:

- Por supuesto camarada, respondió Schumaker. Permítame que le resuma los preparativos; vamos a mantener a 5 sujetos despiertos durante 15 días usando el gas de nuevo desarrollo, para tal fin hemos acondicionado el complejo, las habitaciones de los objetos del experimento están equipadas con varios juegos de distracción así como libros, dentro se encuentras víveres y provisiones más que sobradas para mantener nuestros "voluntarios" en perfecto estado de salud, su nutrición ha sido perfectamente estudiada y todos los alimentos han sido minuciosamente adaptados a sus necesidades fisiológicas.

Caminaron unos metros más traspasando unas puertas batientes que hicieron ruido a su paso, en ese momento se hallaban delante de una gigantesca mampara de más de 12 metros de longitud, parecían contemplar una enorme pecera.



El Doktor continuó su diatriba

- Como verá, si es usted tan amable de seguirme, el cristal está reforzado para evitar cualquier tipo de rotura, el espacio del experimento ha sido cuidadosamente aislado, todo el ambiente está controlado y tasado por sensores, la entrada de oxígeno y la introducción del gas se realizan mediante estás válvulas de inyección.

El científico indicó una serie de tubos transparentes colocados sobre una larga mesa, los recipientes estaban conectados a una maraña de conducciones que se expandían por el techo y descendían como tentáculos por las paredes. En frente de cada cilindro se encontraba un mando deslizador que parecía controlar el flujo de gas que insuflaban los mismos. Había casi un centenar de aquellos tubos dispuestos en una consola que ocupaba casi ocho metros de longitud, todo dispuesto en frente de la pantalla de aquel gigantesco acuario humano. En los tubos había gas, la mayoría presentaba un aspecto blanquecino, lechoso, solo unos pocos estaban teñidos de vivos colores, rojo y azul.

- Si observa usted, este cristal permite que veamos a los voluntarios, sin embargo ellos no pueden hacer lo mismo, lo único que ven es su reflejo en un espejo. En los lugares que no son visibles tenemos micrófonos de alta sensibilidad con lo que podemos captar cualquier tipo de sonido que se produzca en toda la estancia.
Desde este punto de control podemos observar aproximadamente la mitad de la estancia, como ve, no se han dispuesto ni camas ni ningún otro medio donde los sujetos puedan descansar.



Con todo dispuesto y tal y como ya le he explicado nuestro objetivo es mantener a estos 5 sujetos en un estado de imsomnia total durante un periodo de tiempo no inferior a 15 días.

Schumaker continuó hablando mientras a través del cristal le señaló a los cinco "voluntarios".

El Coronel los observó, cinco "voluntarios", cinco deshechos sociales, cinco enemigos del pueblo, posiblemente condenados por sus actividades anticomunistas, ¡pobres desgraciados! su destino estaba escrito, una vez finalizado el experimento, aquellos sujetos ya no serían útiles, el Estado no podía permitirse el lujo de elementos inservibles y por tanto, serían "desechados". Los volvió a mirar, dos de ellos parecían ser alemanes o por lo menos de origen nórdico o ario, -a Schumaker no le importa "experimentar" con sus paisanos- , pensó mientras una mueca socarrona se le dibujaba en el rostro, los otros 3 parecían campesinos rusos, tenían la piel curtida y quemada por el viento y el sol.



- ¿Y bien mi buen Doktor, cuando comenzamos? Dijo el Coronel

- Solo esperamos sus órdenes Camarada, replicó Luwig

- Pues no nos demoremos, adelante, ¡empecemos el experimento!

CONTINUARÁ.

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Bienvenidos a una partida con muuuuuuuuuuuchas, muchasssssss sorpresas, preparaos para pasar una Terrorífica Noche de Miedo.

El precio de la partida será de 20 € e incluirá barbacoa excepto para los jugadores que vengan disfrazados de Zombi/infectado , etc que pagarán 15 € (¡ojo! disfrazado completamente, no nos valen cuatro pintarrajos en la cara, queremos ver zombis con los que tengamos pesadillas la noche siguiente ;-) )

Abriremos las puertas de las pesadillas a las 18:00, sobre las 22:00 haremos un alto, haremos una barbacoa y contaremos horribles historias al amor de la lumbre para a continuación seguir con el juego, hasta las 02:00 aproximadamente.

Uniformidades permitidas: Uniformidad Rusa de cualquier ejercito o estamento policial presente o pasado, uniformidad en Negro o azul policial, cualquier ropa civil, vaqueros, chándal, casual, científico loco, zombi/infectado.

La partida al ser nocturna tendrá una normativa especial, obligatoriamente se han de traer linternas, en el interior de las edificaciones se usará obligatoriamente secundaria o escopeta, en los exteriores se podrán usar réplicas de fusilero en modo semiautomático, la distancia mínima de tiro será de 15 metros o más. No se podrán usar en la partida réplicas de francotirador ni de apoyo, es decir, están excluidas todas las réplicas que superen los 350 pps medidos con 0,20gr. Es decir, será una partida básicamente de escopetas y secundarias.

Evitaremos en lo posible correr y siempre que lo hagamos serán carreras cortas y viendo donde pisamos. Recomendamos con más ahínco que nunca el uso de casco protector.

Para los jugadores que no tengan réplica secundaria o escopeta, La Granja Airsoft prestará una gratuitamente a quien lo solicite, las unidades son limitadas así que se han de pedir por anticipado por el foro. La Granja prestará gratuitamente casco a quien los solicite. Tendremos a la venta linternas tipo led y pilas, si a alguno os hacen falta al igual que en lo anterior reservadlo por el foro.

LISTAS ABIERTAS.

CAPITULO II El quinto día

Fioletovyĭ se encendió un cigarro, aspiró profundamente y soltó el humo lentamente viendo como se deshacía en volutas y girones blanquecinos que destacaban como fantasmas iluminados por el replandor que surgía del cristal de la sala de control. Miró el cigarrillo que sostenía en su mano derecha, era un Lucky Strike americano, al fin y al cabo se podía permitir ciertos placeres vedados al resto de sus compatriotas y el disfrutar de el tabaco "capitalista" era uno de ellos.

Hacía cinco días que el experimento había comenzado, la sala de se encontraba en un ambiente de semipenumbra, las tenues luces ambientales apenas hacían reconocibles los rostros del resto de científicos que se encontraban más alejados de la mampara de control, sus movimientos destacaban por el tono blanco de sus monos y batas blancas, aun así, no podía ver a los que se encontraban más alejados de el en la enorme estancia.



De momento todo había ido bien, el comportamiento y reacciones de los cinco voluntarios había sido el previsto, todas las anotaciones encajaban con los cálculos estimados que se habían elaborado. Las mediciones de gases arrojaban valores normales, el consumo de alimentos y la actitud de los sujetos también se encontraban en los parametros considerados normales.

Durante aquellos cindo días iniciales el Coronel se había dedicado a pasear por Fermy snovideniĭ, el complejo ocupaba la antigua ubicación de una Granja, de hay venía su nombre, en total y debido al elevado número de cientificos, personal auxiliar y miembros de la Fuerzas del Estado, la extensión de Fermy snovideniĭ llegaba a las 25 Hectareas y se había convertido en un pequeño pueblo.



El desarrollo del experimento duraba ya dos años y la mayor parte del personal había sido autorizado a trasladar a sus familias al complejo, así que La Granja de los sueños se había tenido que adaptar a la llegada de mujeres y niños, se había habilitado un pequeño hospital, una escuela, un restaurante/comedor, una comisaría de policía, una carcel donde los alcohólicos podían dormir su borrachera de vozka e incluso un pequeño cementerio.





Fioletovyĭ también tuvo la oportunidad de conocer a los peculiares habitantes del lugar, Herr Doktor Schumaker había conseguido que junto a el también saliesen de Alemania su mujer Nutte y sus dos hijos, Luchs el mayor y su hija pequeña Vielfraß de la que se decía había heredado la hermosura de su madre y la sagaz astucia de su progenitor, tenía a su cargo un nutrido grupo de científicos, su brazo derecho era su ayudante la también alemana Fraulain Cita, una mujer tan bella como cruel que destacaba por su sádico gusto en torturar a los prisioneros que se habían presentado voluntarios al experimento con la falsa promesa de una futura libertad. Ambos tenían a su cargo un númeroso grupo de ciéntificos ocupados en diversas tareas relacionadas con el experimento.

A cargo de la pequeña fuerza de policia militar estaba el Camarada Capitán Оскар, un campesino que se había incorporado al ejercito rojo durante la Gran Guerra Patria y que había hecho carrera en el mismo.

Por último, el Tovarich Komissar Josep era el encargado de conservar, vigilar y hacer cumplir los requerimientos del partido a todos los habitantes de aquella comunidad.



Después de aquellos cinco días, no había mucho más que ver, se había recorrido una y otra vez aquel lugar, había dado largos paseos por el melancólico y tranquilo cementerio, había llegado a la mansión que se alzaba en la cima que dominaba todo el complejo, había visitado todos y cada uno de los edificios que estaban relacionados con el experimento, el laboratorio donde se encontraba el recinto principal del experimento, el sanatorio donde se realizaban las pruebas psiquicas a los voluntarios... al final del quinto día, la labor del Coronel se había empezado a volver monótona.

La evolución del experimento permanecía cadenciosa, los sujetos leían, comían, hacían sus necesidades y sostenían charlas intrascendentes, solamente se registro un pequeño cambio en aquel quinto día del experimento, por primera vez, los voluntarios empezaron a quejarse de su triste destino, comenzaron a lamentar las circustancias que lo habían llevado allí, rememoraron acontecimientos de su trágico pasado, sus vivencias en la Guerra salpidas de terribles y drámaticos hechos.

Y entonces llego el noveno día...

CAPITULO III El noveno día

El grito pareció poder oírse en todo Fermy snovideniĭ, cortó el aire de la noche como un cuchillo oxidado que avanza torpemente por la carne, avanzando y deteniéndose, en el silencio de la madrugada el grito fue el trueno que antecede la llegada de la tormenta, el horrible alarido fue la sirena que anunciaba el principio de la pesadilla.

La taza de café caliente de Fraulain Cita se estrelló contra el suelo rompiéndose en mil pedazos, su piel se tornó en lija áspera, todos los músculos de su cuerpo se tensaron mientras un escalofrío recorrió su espalda, como una lengua de hielo lamiendo su espina dorsal, el frío subió hasta llegar a su nuca donde sintió el helado beso del sonido del grito.



El Comisario Josep y el Capitán Оскар se encontraban charlando en la puerta del cuartel de la milicia cuando llegó hasta ellos, ambos eran hombres curtidos, veteranos de la Guerra Patria, aun así no pudieron evitar que el ominoso sonido les encogiera el corazón. Reaccionaron y corrieron hasta el laboratorio.



Los tres operarios que se encontraban de guardia durante la noche tenían desencajado el rostro de terror, dentro de la mampara, envuelto en una burbuja de horror se encontraba la solitaria figura de un voluntario, de pie, erguido con los brazos pegados a los costados, su garganta emitía aquel chillido constantemente, el grito no cesaba, no paraba, parecía que el flujo de oxigeno a sus pulmones no fuese necesario, su voz subía y bajaba de tono, saltaba tonos y octavas, tejía escalas de puro miedo, era una sinfonía musical escrita por la más perturbada de las mentes, ejecutada por la locura más absoluta.

El Coronel entró precedido de varios soldados, tuvo que gritar a los aterrorizados científicos hasta que estos reaccionaron. Se dirigió hacia Fraulain Cita que continuaba mirando de pie ante el cuadro de control. La mujer era una estatua rodeada por el resplandor azul que atravesaba el cristal.

- ¿Qué demonios pasa aquí?

Fioletovyĭ la zarandeó cogiéndola de los hombros pero continuó sin reaccionar, ¡reaccione Cita, maldita sea! Un sonoro bofetón hizo que la científico volviera en si.

Los ojos desorbitados de la pequeña mujer se clavaron en el rosto del Coronel.

- ¡Responda le digo! ¿Qué ha ocurrido?

Por fin Cita comenzó a hablar:

- Tovarich polkovnik Fioletovyĭ, no lo sabemos exactamente, llevaban cuatro días en situación estacionaria, pero esta mañana, hace 12 horas los voluntarios se sentaron en círculo y permanecieron en silencio mirándose los unos a los otros, hasta hace unos minutos, de repente el sujeto 03 se ha levantado y comenzado a gritar.



Mientras Cita hablaba el resto de prisioneros se incorporó y comenzaron a mirarles a través del cristal, pero todos sabían que aquello era imposible, era un simple efecto visual, detrás de aquel vidrio, el resto de sujetos solo podían ver un espejo en el que se reflejaban, sin embargo, los demacrados rostros de aquellos pobres desdichados se dirigían hacia Cita. Aquellos ojos vacios, muertos, hundidos en sus oscuras órbitas contemplaban el tembloroso cuerpo de la Fraulain. Después se volvieron a sentar alrededor del sujeto nº 3.



El grito duró 3 horas, las que tardaron las cuerdas vocales del prisionero en romperse, lo que duró su garganta hasta que se inundó con su vómito de sangre. A su alrededor sus cuatro compañeros permanecían sentados con las piernas cruzadas, tranquilos, murmurando una y otra vez la interminable letanía de sus desgracias.

Al unísono, los cuatro se levantaron y comenzaron a arrancar páginas de los libros que tenían repartidos por toda el área de experimentación, los llenaron de heces y comenzaron a restregarlos por el cristal de la mampara, lentamente fueron tapando, pegando y ensuciando toda la superficie. Al rato habían conseguido tapar cualquier resquicio por el cual los científicos pudieran observar el área de experimentación.

A partir de aquel momento los micrófonos no captaron ningún sonido, sin embargo, los sensores no detectaron ningún intento de sabotaje ni señal de malfuncionamiento, sencillamente, dentro de la estancia, no se producía ningún ruido. Los medidores de consumo de oxigeno ascendieron abrúptamente , el volumen de gasto se disparó, comparativamente era la cantidad necesaria como para mínimo 10 personas sometidas a una actividad física constante y de alto nivel.


El día catorce, después de una reunión de emergencia, el Coronel autorizó a Schumaker a alterar los protocolos del experimento.

Con tranquilidad el Doktor se aproximó al micrófono del intercomunicador y apretó el botón.

- Atención voluntarios, escúchenme con atención, repito, escúchenme con atención, no se están comportando ustedes con lo requerido en las bases de la experimentación, no observaremos ningún tipo de privilegio con aquellos que no obedezcan ni se adapten a lo acordado a la normativa acordada, vamos a llevar a cabo una inspección ocular del recinto, en una próxima comunicación se les informará de nuestra entrada, aléjense de las puertas y túmbense en el suelo con las manos en la nuca, cualquier incumplimiento de estas reglas y serán disparados de inmediato. Si colaboran uno de ustedes podrá salir para un reconocimiento médico, le será otorgada la baja del experimento y será puesto en libertad.



Pasaron unos instantes durante los cuales el silencio alcanzó grado físico, la ausencia de sonido era como un bloque rellenado una habitación, tan sólido que se podía tocar.

Cuando ya nadie esperaba oir nada, todos escucharon a través de los altavoces la voz de uno de aquellos desdichados. Era una voz calmada, sin ninguna inflexión, sin ningún sentimiento, sin vida, era una voz muerta…

Solo dijo una frase antes de enmuedecer de nuevo:

“No queremos ser liberados”.

El mismo silencio de instantes anteriores lleno de nuevo la estancia.

Aquella noche los máximos responsables del experimento y de Fermy snovideniĭ tuvieron una reunión de emergencia. En el amanecer del día 15, abrirían las puertas y entrarían dentro…



CONTINUARÁ.